La ‘influencer’ confiesa que la falta de apoyo de Ezequiel Garay a la hora de tener un segundo hijo y la carga de la maternidad han sido los verdaderos detonantes de la ruptura.
Han pasado seis meses desde que Tamara Gorro (35) anunciara su separación de Ezequiel Garay (35). En este tiempo, la ‘influencer‘ no ha ocultado que su depresión ha tenido mucho que ver, aunque ha sido la publicación de su libro, ‘Cuando el corazón llora’, la que ha desvelado los motivos de la ruptura.
«NO QUERÍA MÁS NIÑOS»
En sus paginas revela que los primeros escollos surgieron cuando se mudaron a Portugal por la profesión de él, aunque lo peor sucedió en Rusia. «Estar allí me afectó bastante. Dejé los programas […]. Me sentía como un mueble, ha confesado. Sus «bajones» por no poder convertirse en madre y las 18 veces que lo intenté a través de la reproducción asistida tampoco ayudaron. Fue entonces cuando decidieron iniciar los trámites de una gestación subrogada y nació Shaila (6).
A pesar de la felicidad que supuso su llegada, las cosas volvieron a torcerse. Tamara quería ampliar la familia, pero Garay no. «Eze no me apoyaba. No quería por dos motivos: ni quería más hijos ni que yo pasase de nuevo por todo lo que pasé con mi niña», afirma.
Finalmente, decidieron comenzar un proceso de fertilidad, aunque se quedó embarazada de forma natural y llegó Antonio (4). Ya con sus dos hijos en casa, el cuento entre la pareja cambio mucho y al cansancio propio de una etapa, así se sumó que les faltaba tiempo para hacer planes juntos, lo que les ha afectado «mucho». Pese a todo, no pierde la esperanza de regresar con él y así poder «terminar la vida juntos».
Periodista y comentarista en esto del ‘salseo’ y el mundo del corazón.
Paseando disfrazada de gata curiosa entres famosos y famosetes.
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