La dura decisión de Javier Santos

Tras la negativa del Tribunal de Estrasburgo de reabrir el caso de la supuesta paternidad de Julio Iglesias, el joven suplica ahora poder hablar con el artista: «No quiero dinero ni cariño, solo una conversación tranquila con él».

El pasado octubre, y tras 30 infatigables años de lucha para ser reconocido como hijo de Julio Iglesias (79), Javier Santos (44) recibió un nuevo varapalo: el Tribunal de Estrasburgo le ha declinado reabrir el caso de la supuesta paternidad del artista al considerar que el asunto era «cosa juzgada» en España.

Aunque en un primer momento, a través de su abogado, Fernando Osuna, el joven aseguró que seguiría batallando por su verdad, finalmente ha decidido tirar la toalla afirmando que su único objetivo ahora es poder tener un cara a cara con el cantante. «La sociedad está cambiando y el comportamiento de mi padre a quien perjudica es a él mismo. Yo entiendo que mi madre esté muy enfadada por este tema, pero yo no pienso así… yo no quiero dinero ni pido cariño, yo lo que quiero es una conversación tranquila con mi padre porque los que estamos en la situación en la que yo estoy tenemos la necesidad de conocer nuestro origen», ha explicado en el plató de ‘Fiesta’.

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A SUS ‘HERMANOS’

Acompañado de su madre, María Edite (67), quien acaba de confesar que llegó a pensar en suicidarse, también reconoció que le gustaría que sus hermanos hicieran por hablar con él. Aunque no sabe si ese momento llegará, si admitió que ya solo confía en que algo haga cambiar de parecer al cantante:

«Yo ya no creo en la justicia, deja mucho que desear. Pero sí que creo en las personas y quiero creer en mi padre, creo que no es tonto y que sabe que soy su hijo, sabe lo que tiene que hacer».

Una súplica con la que desea cerrar un camino con demasiado coste emocional en su infancia: «Me pegaban, me daban palizas, me robaban la moto… creo que si mi padre hubiese actuado de otra manera todo habría sido distinto».