ALONSO CAPARRÓS: “NO SÉ CÓMO NO ME HE MUERTO”

Alonso Caparrós relata el infierno que vivió durante años con la cocaína.

“Me atrapé de una manera bestial, consumía para evadirme de mi mismo”, asegura el colaborador.

Hace ya unos años que Alonso Caparros (49) confeso que sufría una fuerte y larga adicción a las drogas, con las que comenzó a tontear muy joven. Y ahora, cuando ese infierno parece haber quedado atrás, el colaborador de televisión ha reflexionado sobre aquella época con Sofía Cristo (36) en los encuentros que esta realiza para ayudar a personas drogodependientes.

Así pues, el presentador ha reflexionado abierta y francamente acerca de esos años. “En mi caso fue brutal, ya sea por genética o por las circunstancias, el enamoramiento fue muy atroz. Soñaba con montañas de cocaína y me atrapé de una manera bestial. Y esa sensación sigue latente. Fue una invasión”, explica Alonso, que incluso asegura que ha llegado a plantearse en muchas ocasiones cómo es posible que siga con vida.

“¿Por qué no me he muerto? Con lo que he consumido…”, se cuestiona, siendo consciente de que es algo que le ha hecho cambiar su forma de pensar y ver las cosas.

 

“NO ES QUE NO QUISIERA DEJARLO, ES QUE HAY MIEDOS E INSEGURIDADES”

 

INCAPAZ DE ABANDONARLAS

Ante la pregunta de qué fue lo que más le sedujo de las drogas, el hijo de Andrés Caparros (76) lo tiene claro.

“En mi caso no me hacía sentirme más seguro, era para huir de mi mismo, no para tirar hacia delante.”

“Dependía de la época de mi vida”, asevera, a la vez que admite que supo desde el principio que era incapaz de desengancharse.

“Estuve con muchos tratamientos y no pude. No es que no quieras dejarlo, es que hay muchos miedos, muchas inseguridades”, explica Alonso, que llegó a estar ingresado para desintoxicarse en la López Ibor. Finalmente, tras muchos años de ayuda terapéutica y el apoyo de su mujer, Angélica, el colaborador de ‘Sálvame‘ logró dejar la cocaína, aunque no especifica cuando.

“Tenía que seguir con mi vida hacia delante. Hasta que no lo he convertido en un reto intelectual, no lo he superado”, reconoce.