Terelu Campos se ha enfrentado por última vez a sus compañeros de ‘Sálvame’ tras decidir dejar el programa para siempre, y lo ha hecho serena y con la naturalidad que le caracteriza. Una visita diferente al plató en el que ha trabajado más de nueve años y del que se marchó el pasado 22 de abril; un mes ha pasado hasta volverla a ver sentada en el plató de ‘Sábado Deluxe’.
Un adiós para siempre con muchos matices. Y es que Terelu, si bien ha asegurado que se siente “firme” en su decisión, ha dicho tajante: “lo único irreversible en esta vida es la muerte”.
Terelu ha confesado que los últimos siete meses de su vida han sido complicados. “He sufrido mucho, estos meses han contribuido mucho en que yo no pueda seguir“, ha dicho a Jorge Javier Vázquez. A lo que ha añadido: “En mi mano está el poder quitarme un sufrimiento y un mal rato. Creo que me lo merezco“. “Yo creo que vas a volver”, le ha respondido Jorge Javier Vázquez, que por otra parte ha apoyado la decisión de su compañera de alejarse de lo que le hace daño. “La entiendo”, ha afirmado.
Terelu, relajada, ha confesado que tiene miedo al futuro, pero que al mismo tiempo siente “ilusión y esperanza”. “Tengo muchas ganas, por primera vez en mucho tiempo lo siento así”, ha dicho. Entonces, Jorge Javier le ha preguntado acerca de su situación financiera actual. “Económicamente estoy fatalmente”, le ha respondido esta. “No soy una persona que sienta apego por nada material. Quiero decir, si tengo que vender algún día mi casa, la vendo“, ha revelado relajada y sin perder la sonrisa.
La dureza de ‘Sálvame’ ha sido la única razón por la que Terelu ha decidido marcharse. “Quiero darme el gusto de ser yo lo primero. Sálvame es muy complicado y quien diga lo contrario no tiene ni idea”, ha dicho.
El futuro se vislumbra esperanzador. Terelu tiene ganas y eso es lo importante, seguirá colaborando en Huellas de Elefante, de Telemadrid, y está abierta a cualquier propuesta laboral. “¿Si te llamara Ana Rosa le dirías que sí?”, le preguntó Jorge Javier Vázquez. “Sí, claro”, respondió con rotundidad la mayor de las Campos.
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