El futbolista del F. C. Barcelona ha defendido que no tiene «nada que esconder» en relación con la comisión que la empresa Kosmos, de la que es copropietario, cobro por el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí, una operación que ha defendido como «legal».
Según la información publicada por ‘El Confidencial’, la Real Federación Española de Fútbol, a través de su presidente, Luis Rubiales, se aseguró una cantidad de 40 millones de euros por cada edición, mientras que la empresa de Piqué consiguió 4 tras el contrato firmado con la compañía saudí Sela.
Y, aunque los más críticos señalan que, pese a que entre dentro de la legalidad, se trata de una operación poco moral al existir conflicto de intereses, el catalán insiste en que «lo poco ilegal es coger unos audios privados y publicaros», refiriéndose a las conversaciones en las que aparecería también el nombre del rey emérito «por si podía echar una mano».
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