Últimamente la colaboradora no puede contener las lágrimas durante las conexiones por video llamada con ‘Sélvame’ y ha asegurado que no está nada bien y que está pasándolo muy mal.
“Estoy perdida y me da miedo que me pase algo porque mi hija está fuera”, confesó.
Corren días complicados para todos y los sentimientos de melancolía y desconsuelo están mas presentes que nunca. Algo que también le ha ocurrido a Mila Ximénez, que no pudo contener el llanto durante una conexión en directo a través de videollamada con ‘Salvame’ en la que pudo hablar con su intimo amigo Kiko Hernández.
“Llevo flojita varias semanas. Yo pensé que no me iba a derrumbar, pero he visto a Kiko y se me ha ido toda la fortaleza”, confesó la sevillana. Ademas de echar mucho de menos a su compañero de programa, la colaboradora reconoció que no lo esta pasando nada bien debido al aislamiento al que se encuentra sometida toda España después de que comenzase a expandirse la pandemia de coronavirus.
Una complicada situación que se ha unido a las fuertes molestias que esta padeciendo por el herpes zoster que sufre en la zona de la cara desde hace semanas:
“Echo de menos mi vida, mi libertad y cosas como ir a trabajar o tomar algo después, a las que antes no le daba importancia. Hay días que son muy duros. Ademas, estoy soportando un dolor tremendo por culpa del herpes y no se va. A las ocho de la tarde me empiezo a tomar analgésicos y ya no quiero saber nada de nadie”.
Pese a que todo esto le esta suponiendo un gran esfuerzo, lo mas complicado de todo es estar lejos de su familia en estos momentos, sobre todo de su hija, Alba Santana, y sus nietos, Victoria y Alexander, que viven en Holanda.
“No está siendo nada fácil y encima ha sido el cumpleaños de Alba. Son muchas cosas. Ademas, soy incapaz de cruzar la calle ni para ir a la farmacia. Tengo miedo de que me pase algo o me tengan que ingresar y mi hija esta fuera”, reconoció sin poder contener la emoción, sabiendo que si surge un contratiempo ella no podrá viajar a España. Y es que, a pesar de lo decaída que se siente, su entorno mas cercano desconocía sus sentimientos:
“Lo siento por los que me están viendo porque cuando hacemos un chat familiar digo que estoy bien. Pero claro que no lo estoy, no lo estoy”.
La desesperación de Mila es tal que, aunque reconoce que esta poniendo de su parte para superarlo, no lo consigue y se encuentra cada vez peor anímicamernte.
“Estoy en un bucle de tristeza y completamente perdida. Solo quiero que llegue la noche para ir a dormir y que acabe el día”, admitió consciente de que todo esto se esta convirtiendo en un grave problema para ella.
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