Feliz, exultante, relajada y triunfando como la estrella musical que es. Así se ha mostrado la artista en su gira al otro lado del charco, donde parece haber recuperado la alegría perdida y las ganas de vivir.
Como una niña con zapatos nuevos. Así se ha mostrado Isabel Pantoja (66) en su gira musical, que la ha llevado a distintos puntos de América. Después de años enclaustrada en su finca, Cantora, y tras perder a su madre, dona Ana, y a su hermano Bernardo, por fin la tonadillera vuelve a sonreír y lo hace al otro lado del charco, conquistando los escenarios más emblemáticos de Miami, Nueva York, Los Ángeles y Puerto Rico, donde ha colgado el cartel de «no hay entradas».
El vestuario millonario de Isabel Pantoja
A Isabel se la ha visto feliz, relajada, exultante y muy agradecida a los fans que la han acogido con tanto cariño. Gracias a Anabel Pantoja (36), que ejerce como su asistente, hemos podido ver como la artista ha visitado los sitios más turísticos de la Ciudad de los rascacielos, visitando a la Virgen de Guadalupe en la catedral de Saint Patrick, disfrutando de las vistas de la metrópoli desde Times Square o pisando Rockefeller Center como una turista más y mostrando una nueva faceta desconocida hasta ahora.
Quizá tenga mucho que ver que allí se siente más libre sin la presión mediática, y por eso no extraña que su hija, Chabelita (27), haya comentado que uno de los sueños de su madre es vivir en América. Un país que la ha acogido con los brazos abiertos y al que ha devuelto el afecto, dando lo mejor de ella misma en sus recitales, en los que ha lucido unos trajes espectaculares que han costado más de 700.000 dólares.
Para verla de nuevo, habrá que esperar al próximo 26 de agosto, cuando se reencuentre en Gran Canaria con su público patrio.
Periodista y comentarista en esto del ‘salseo’ y el mundo del corazón.
Paseando disfrazada de gata curiosa entres famosos y famosetes.
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