Su primer esposo, íntimo amigo del emérito, asegura que todo lo que cuenta la alemana en el podcast ‘Matar a Dumbo’ «es totalmente falso».
Semana a semana, Corinna Larsen (58) continúa desvelando más detalles de su romance con don Juan Carlos (84) en el pódcast ‘Matar a Dumbo’. Una verdadera caja de Pandora que la alemana estaría abriendo con el objetivo, según fuentes cercanas al emérito, de «derribar» al padre de Felipe VI (54) y, de paso, «ganar dinero», pero que ha comenzado a volverse en su contra.
Por un lado, porque el hecho de airear de este modo sus intimidades y otras actitudes contradictorias de la empresaria estarían influyendo de manera negativa en los magistrados que llevan su demanda de acoso contra Juan Carlos de Borbón en Londres, ya que, al parecer, no acaban de creerse del todo su testimonio. Y, por otro, porque su primer exmarido, Philip Adkins (64), ha reaccionado a lo que Corinna ha contado sobre el famoso viaje a Botsuana en 2012, en el que el entonces rey se rompió la cadera, y no lo ha hecho a favor de la madre de su hija, Anastasia (30), sino más bien al contrario.
Las incongruencias del testimonio de Corinna Larsen
En el cuarto episodio del podcast, Larsen afirma que el emérito se cayó debido a su estado de embriaguez y que él ni siquiera recordaba muy bien qué había ocurrido: «El alcohol le había nublado la mente». Sin embargo, Adkins, que formó parte del polémico safari de lujo, asegura que Corinna miente. «Lo que dice es totalmente falso… Ella es una mujer inestable y peligrosa», afirma de manera contundente el empresario, que estuvo casado con la alemana entre 1991 y 1994 y conoció a Juan Carlos, del que se hizo amigo, gracias a ella.
Melissa Reginald es una experta en Casas Reales, y a la que muchos consideran como la Jaime Peñafiel en la sombra. Poco amiga de los medios audiovisuales porque siempre ha sido muy celosa de su intimidad. Sabe mucho. Habla lo justo.
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