Un buen órdago ha sido el que le ha lanzado Chelo García-Cortés a David Valldeperas.
La experiencia de ‘Supervivientes 2019’ ha ejercido un gran cambio sobre la periodista. Sobre todo en su actitud, mucho más segura y desafiante que cuando puso rumbo a la isla. Sin embargo, esta postura no está siendo bien recibida entre sus compañeros de ‘Sálvame’, que se han mostrado contrariados por la falta de autocrítica de su compañera.
El gesto que ha tenido este miércoles la colaboradora con sus compañeros y, por extensión con su director, ha sido interpretado como una falta de humildad y de generosidad para con un trabajo que comparten precisamente con ella.
Chelo se ha negado a entrar en directo en el magacín con el que colabora para aclarar la polémica que mantiene con compañeras y amigas como María Patiño y Gema López, que se han sentido traicionadas y decepcionadas con su actitud en Honduras.
Solo Omar Suárez ha conseguido grabar una breve conversación con ella, en la que no ha dudado en lanzarles un ‘pildorazo’ que, por el enfado monumental de Valldeperas, se le podría volver en contra.
Chelo ha decidido ‘plantarles’ revelando que por el momento no vuelve a plató. El motivo: un asueto estival que no quiere demorar por más tiempo. “Voy a hacer vacaciones como todos los que hemos ido a ‘Supervivientes’. Las necesito que, desde que he venido no me habéis dejado parar”, decía a Omar viniéndose arriba.
García-Cortés, que asegura que su amistad con Isabel Pantoja está restaurada, evitaba entrar en polémicas por las acusaciones tan duras que le han dedicado sus compañeros, pero afirmaba: “A mí lo que realmente me duele son los amigos. Con mis compañeros hablaré a la vuelta y lo haré a la cara, porque he visto cosas y no me han gustado”.
Después de ese vídeo, Chelo se encerraba a cal y canto en su casa junto a Maggy, y no dejaba espacio para ningún contacto más con ‘Sálvame’. La crispación se notaba en plató, y ha ido en aumento cuando no le ha cogido ni siquiera el teléfono a Carlota Corredera.
Pero el momento de máxima tensión lo ha desencadenado la tertuliana de asueto cuando no le ha querido coger el teléfono a su director y jefe directo, que no se ha tomado nada bien su gesto desafiante, sino más bien como una insubordinación que le pone las cosas difíciles cuando vuelva al trabajo. Valldeperas se ha expresado en unos términos durísimos, evidenciando que con esa actitud Chelo se estaba equivocando: “Está en todo su derecho de no salir en directo, pero esto lo interpreto como que desautoriza a la persona que la lleva dirigiendo tantos años”.
Y le ha mandado un mensaje que seguro que no olvidará en su vida, o al menos la tendrá pensando el resto de sus vacaciones: “Aquí los tiempos no los decide Chelo. Ni ella ni ninguno, sino yo que soy el director. Intento hacer un buen programa y Chelo es parte del programa. Esto es un curro. Y ya queda todo dicho. Ahora la conversación será en una reunión, en un despacho”.
Nada más pronunciar estas palabras, empezaba a sonar el teléfono de David, pero su esfuerzo era en vano. “Ahora ya no quiero hablar contigo y eso va a ser jodido”, le advertía desde su atril.
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