Recién aterrizada de su luna de miel, Elena Tablada ha visitado los juzgados de Alcobendas, en Madrid, donde se ha celebrado el juicio por la demanda que su ex, el cantante David Bisbal, interpuso contra ella con el fin de proteger la intimidad de la hija de ambos, Ella. La polémica se remonta a septiembre de 2018 cuando la diseñadora de joyas visitó el programa ‘Viva la vida’ y confesó que la relación con el almeriense era “insostenible” por la exposición de Ella en las redes sociales.
Ese día, Bisbal sacó el ‘hacha de guerra’ y dejó clara que su posición en el tema. “Los asuntos de los menores no deben estar en los debates. Hay que tener cuidado. Quiero decir una cosa muy importante: Cuando la madre de mi hija va a la televisión a hablar de este tipo de cosas, no lo debería de hacer. Yo previamente he tratado de convencerla para que proteja la intimidad de su hija, que no lo ha hecho nunca. Yo no he dicho jamás que ni la madre ni la familia de mi hija pueda poner fotos de mi hija. Lo único que quiero es que protejan la intimidad de una menor”, afirmaba David el pasado mes de marzo tras imponer una demanda contra Elena.
Ahora, la expareja se ha visto las caras en los juzgados y la actitud de uno y de otro era totalmente opuesta. Bisbal llegaba acompañado por su abogado y luciendo una gran sonrisa. El cantante acaba de ser padre por segunda vez junto a la modelo venezolana Rosanna Zanetti. Mientas que Elena aparecía con gesto serio, oscuras gafas de sol y acompañada por su marido, el abogado Javier Ungría.
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