Tras unos días ingresada para someterse a unas pruebas médicas, continúa su recuperación en casa con noticias esperanzadoras y un tratamiento distinto que ya ha iniciado.
Han sido días de mucha preocupación para Mila Ximénez (68). Después de permanecer ingresada en la clínica La Luz de Madrid por decisión de su doctora para someterse a una serie de pruebas, continua por fin su recuperación en casa tras recibir noticias esperanzadoras y comenzar un nuevo tratamiento. Un verdadero rayo de esperanza después de sus últimas declaraciones en público, en las que manifestó su profundo cansancio. «Se ha complicado una de las zonas, que se ha disparado. Me van a hacer un TAC y, dependiendo de eso, tomaré una decisión. Si me dicen que esto va para larguísimo y no saben si va a funcionar, se acabó», explicaba el 8 de marzo en su reaparición en Sálvame. Ahora, con estas buenas noticias sobre la mesa, la sevillana ha decidido ir a por todas y afrontar una nueva etapa en su curación, algo que ha causado una enorme alegría en su entorno, sobre todo por el cambio en su ánimo. Y es que la sevillana aseguró que había pensado en tirar la toalla después de los durísimos efectos de la medicación que estaba recibiendo. «He estado casi un mes en la cama sin poder moverme. Lo que he pasado no se lo deseo a nadie. No es vida», explicaba.
SUS GRANDES APOYOS
Sin ocultar la gravedad de su enfermedad, la comunicadora admitía en ese momento que estaba siendo un camino largo y duro. «Tengo mucha fuerza, pero cada vez me cuesta más sacarla… Mi familia se pone de los nervios, pero si esto me dura dos años los 70 es una edad muy elegante para morir», admitía muy serena. Pese a todo, Mila ha vuelto a ponerse en pie ayudada de sus seres queridos, sobre todo de su hermana Concha y su hija, Alba Santana (36), que ha viajado desde Ámsterdam para estar con su madre en estos momentos. Hoy, la joven sigue siendo su principal pilar y por quien la sevillana 3 ha prometido seguir luchando hasta vencer la batalla más difícil de su vida.
EL TRABAJO, SU GRAN MEDICINA
Durante esos diez meses de lucha infatigable, Mila ha encontrado en Sálvame y en el cariño incondicional de sus compañeros, a los que ha reconocido echar mucho de menos, su mejor medicina. Hace un mes reaparecía en el plató del programa tras estar casi un mes apartada de las cámaras. «Estoy feliz de voIver», dijo emocionada.
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