Quiere presentarse como candidato a la presidencia de Estados Unidos y su primer mitin ha dado la vuelta al mundo… y no por su política.
El cantante Kanye West revelaba entre lágrimas que pensó interrumpir el primer embarazo de su mujer, Kim Kardashian, a la que acusaba de querer encerrarlo en un psiquiátrico.
También aseguraba en sus redes que quería el divorcio y criticaba a su suegra, Krisjenner. Poco después, el artista borraba los mensajes y pedía perdón, mientras que Kim hablaba, por primera vez, pidiendo compasión y respeto por esta difícil situación, originada por la enfermedad mental que padece West -sufre trastorno bipolar-, quien, al parecer, habría dejado de tomar la medicación.
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