David Bustamante y Yana Olina, historia de amor
El cantante y la bailarina están de celebración. Ambos han cumplido años con pocos días de diferencia y, como regalo, han gritado su amor a los cuatro vientos a través de unas románticas dedicatorias en sus redes sociales.
Dos años después de firmar su divorcio con Paula Echevarría, el cántabro esta pletórico de amor por Yana Oliva, la bailarina que mientras atravesaba ese duro proceso le fue robando el corazón coreografía tras coreografía en ’Bailando con las estrellas’.
Y, aunque la relación comenzó discreta y tuvo que sortear alguna crisis, el tiempo ha ido afianzando a pasos agigantados sus sentimientos y, con motivo del cumpleaños de la bailarina rusa, el cántabro ha abierto completamente su corazón.
“Un día me dijiste que yo era tu persona favorita. Nunca nadie dijo tanto de una forma tan bonita… Hoy es el segundo cumpleaños que podemos dedicarnos, entre abrazos tan sinceros como el hecho de besarnos. Siempre tuyo y sin reservas. Y, pase lo que pase, eres el amor de mi vida, eres un punto y aparte”, escribió el cantante junto a una fotografía de Yana, que pocos días después, por el 38.° aniversario de él, le respondía a la declaración de amor con otra:
“Gracias por compartir tu vida conmigo, mi amor! Por convertirte en mi confiable apoyo, por comprender y por estar a mi lado pase lo que pase, Cada minuto sin ti parece ser eterno, cada segundo contigo me lleva al paraíso. Felicidades, cariño, deseo que todo lo que planeas tenga éxito y yo lo vea junto a ti”
EL GRAN PASO ADELANTE DE DAVID BUSTAMANTE
Desde que la pareja decidió vivir bajo el mismo techo, a mediados de 2019, su historia de amor se instalo en una eterna luna de miel. Ella dejo Mallorca, donde residía, para que la distancia no fuera un impedimento en la relación, y él cambié su ‘loft’ de soltero por un piso con tres habitaciones en Pozuelo de Alarcón -donde la artista ha comenzado a impartir clases de baile-
Después llego el verano, las escapadas románticas y los paseos por las playas de Cantabria, la tierra que vio nacer a Bustamante y en la que, unos meses después, pasaron las Navidades.
“Eres mi alma gemela, eres mi mundo. Gracias por amarme como soy. Siempre contigo”, escribió Yana en una imagen de uno de sus viajes a San Vicente de la Barquera.
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