Los pocos amigos que aún le quedan dan la voz de alarma y afirman que su situación económica y emocional es «muy delicada», lo que ha afectado a su ánimo. «Esté destrozada», aseguran angustiados».
Desde hace varias semanas, el plató de ‘Sálvame’ se ha levantado en armas contra la que fuera una de sus colaboradoras, habituales Belén Rodríguez (56).
La supuesta traición de esta a Kiko Hernández (46) al desvelar que le hizo un préstamo económico y contar a sus espaldas que dudaba de que se lo devolviera no solo ha dinamitado la amistad entre ambos, sino también la de gran parte del equipo.
Algunos como Jorge Javier Vázquez (51) o Carmen Borrego (56) han sido especialmente duros con la que fuera su amiga, a la que toda esta situación está pasando factura. Desde que exploto el escándalo, Belén no ha vuelto a ninguno de los programas en los que trabajaba y no solo eso, acabé llamando a la Policía al ver unas cámaras de ‘Sálvame’ apostadas en la puerta de su casa y que, según ella, atentaban contra su «intimidad y dignidad».
Tanta tensión no le está haciendo ningún bien a Rodríguez, que está «destrozada» y se siente «sola y destruida». Así lo han asegurado los pocos amigos que aún le quedan ala colaboradora, que se muestran muy preocupados por ella.
Afirman que su situación emocional y económica es «muy delicada y necesita trabajar», y afirman:
«La están machacando y no tiene la fortaleza mental que pudiera parecer»
A pesar de estas palabras, los que se sienten traicionados por la colaboradora no piensan echar el freno y Kiko Hernández ha vuelto a cargar duramente contra ella afirmando:
«Nunca jamás voy a mirarla a la cara. Me da hasta asco, qué pena de verdad»
Solo Belén Esteban (49) ha salido en defensa de la colaboradora alegando:
«Ha metido la pata, es verdad, pero no me parece bien que ahora todo el mundo vaya contra ella»
Comentarista de todo esto de la prensa del corazón, llamémosle prensa rosa. Adicta al famoseo habitual de los programas de telerrealidad.
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