Claro, a continuación, remarcaré en negrita las frases más importantes del texto:
La partida de la respetada figura de Luisa Cantero Sánchez, cariñosamente conocida como “la tata” para el afamado actor Miguel Ángel Muñoz, ha dejado un profundo pesar en los corazones de quienes la conocieron y en los seguidores del destacado intérprete, quienes a lo largo de los años han sido testigos de la especial relación que los unió. El propio Miguel Ángel Muñoz, a través de sus plataformas digitales, ha compartido una conmovedora carta de despedida dirigida a esta figura significativa en su vida, a quien describió como su “maestra, musa y gran amor”.
La carta, impregnada de una emotividad palpable, expresa la gratitud del actor por el invaluable cuidado y afecto recibido a lo largo de cuatro décadas a su lado. Asimismo, se hace hincapié en la importancia de expresar el amor hacia nuestros seres queridos mientras aún están presentes, honrando así la conexión única que se compartió con Luisa Cantero.
Miguel Ángel Muñoz relata que la preparación para esta dolorosa despedida se extendió durante más de diez años, y recientemente, durante el período de pandemia, pudo finalmente confrontar la inminente partida de su tata con mayor serenidad gracias a diversos procesos terapéuticos y formaciones en el acompañamiento al duelo y el final de la vida.
La despedida, llevada a cabo según los deseos de la tata, fue descrita como discreta y sencilla, con la presencia de unos pocos allegados, quienes, aun avisados con poco tiempo de antelación, mostraron su compromiso al viajar desde diversos lugares para acompañar a la familia en ese difícil momento. La carta destaca la gratitud hacia aquellos que estuvieron presentes y también hacia aquellos que, por distintas circunstancias, no pudieron asistir, pero manifestaron su apoyo de otras maneras.
El agradecimiento se extiende a la familia y a la “familia elegida” del actor, que brindó un apoyo incondicional y lleno de cuidado durante este delicado proceso. Miguel Ángel Muñoz enfatiza el orgullo que siente por poder cumplir con los deseos de su tata en el momento de comunicar la noticia con la delicadeza que ella hubiese deseado.
En sus palabras finales, el actor ofrece un sentido brindis por su querida tata, resaltando su rol fundamental como maestra, musa, actriz, gitana y, sobre todo, como su gran amor. La carta concluye con el deseo de que descanse en paz, manteniendo siempre presente el profundo amor y la conexión que compartieron.
Así, la partida de Luisa Cantero Sánchez deja un legado imborrable en la vida de Miguel Ángel Muñoz y en la memoria de quienes tuvieron el privilegio de conocerla y compartir su cariño. Su historia de amor y entrega perdurará como un testimonio de la importancia de valorar y expresar nuestros afectos mientras tenemos la oportunidad de hacerlo.
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