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Jordi Cruz y Rebecca Lima se casan en una boda llena de misterio con destacados invitados Un enlace marcado por la privacidad Jordi Cruz, uno de los cocineros más reconocidos de España, y la talentosa arquitecta y diseñadora Rebecca Lima han dado un paso importante en su vida personal al contraer matrimonio este pasado sábado. El evento, que ha sido meticulosamente planificado y envuelto en un halo de secretismo, tuvo lugar en un escenario de ensueño: el Convento de Blanes en la Costa Brava. Este enclave, situado en la provincia de Girona, con impresionantes vistas al mar Mediterráneo, fue el escenario perfecto para la ceremonia, que reunió a más de 180 invitados. El ambiente de misterio que rodeó la boda no fue casual. Desde el principio, la pareja manifestó su deseo de mantener la celebración en la más estricta intimidad. A pesar de ello, la boda no pasó desapercibida y logró captar la atención de los medios y seguidores, ávidos por conocer los detalles de este significativo evento. Una ceremonia religiosa con un toque especial En las semanas previas, Rebecca Lima compartió que la ceremonia sería religiosa, una elección que subraya la importancia del compromiso que ambos han decidido asumir. Pero este no fue el único evento de la jornada. La pareja también aprovechó la ocasión para celebrar el bautizo de su hijo Noah, quien recientemente cumplió un año. El pequeño Noah no solo estuvo presente en la ceremonia, sino que jugó un papel fundamental, actuando como testigo del enlace de sus padres. "Noah es el fruto de nuestra relación y el gran protagonista de nuestras vidas. Celebraremos nuestro amor y su vida. Será una fiesta para nosotros y, evidentemente también para él, y no puede faltar de ninguna de las maneras", comentó la emocionada madre, destacando la importancia de su hijo en este día tan especial. Influencia brasileña y un vestido único Si bien la pareja mantuvo en secreto muchos de los detalles de su boda, Rebecca Lima no pudo evitar revelar que la ceremonia y la recepción estarían impregnadas de elementos representativos de su país natal, Brasil. "Principalmente, la alegría, el ritmo y la caipirinha", señaló con entusiasmo. La cultura brasileña, conocida por su vibrante energía y pasión por la vida, se hizo sentir en cada aspecto de la celebración, desde la música hasta las bebidas, asegurando que los invitados disfrutaran de una experiencia inolvidable. En cuanto al vestido de novia, Rebecca Lima decidió optar por un diseño propio, lo que no solo refleja su estilo personal, sino también su talento como diseñadora. Aunque no se revelaron detalles específicos sobre el vestido antes del gran día, se supo que sería una creación única y especial, adecuada para la magnitud del evento. Un selecto grupo de invitados y un menú estelar La lista de invitados fue tan impresionante como el evento en sí. Entre los asistentes se encontraban los compañeros de Jordi Cruz en el popular programa de televisión MasterChef, Samantha Vallejo-Nágera y Pepe Rodríguez. Sin embargo, estos no fueron los únicos grandes nombres de la gastronomía que asistieron. La boda también contó con la presencia de prestigiosos chefs como Martín Berasategui, Quique Dacosta y el renombrado repostero Christian Escribà. Estas figuras, respetadas en el ámbito culinario tanto a nivel nacional como internacional, añadieron un toque de distinción a la celebración. Pero si hay algo que no podía pasar desapercibido en la boda de Jordi Cruz, era el menú. La pareja confió esta tarea tan importante a Nandu Jubany, un chef catalán que ha acumulado reconocimientos de la talla de cinco soles Repsol y una estrella Michelin. "Será un menú elegante, singular, factible y que esté muy rico. He cocinado muchas bodas en mi vida y sé lo que funciona. Y creo que he elegido al mejor cocinero para ese día", comentó Jordi Cruz en julio, mostrando su total confianza en que Jubany ofrecería una experiencia gastronómica a la altura del evento. La comida fue, sin duda, uno de los puntos culminantes del día, destacando por su sofisticación y sabor, y reflejando el estándar culinario que Jordi Cruz siempre ha defendido. Personalidades del espectáculo y el deporte se suman a la celebración Además de las luminarias del mundo de la cocina, la boda de Jordi Cruz y Rebecca Lima también atrajo a varias personalidades destacadas del mundo del espectáculo y el deporte. Ona Carbonell, Boris Izaguirre, Mario Vaquerizo y Álvaro Muñoz Escassi fueron algunos de los rostros conocidos que no quisieron perderse este acontecimiento. Estos invitados no solo aportaron un toque de glamour al evento, sino que también demostraron el amplio círculo social que la pareja ha cultivado a lo largo de los años. Boris Izaguirre se tomó un momento para conversar con la prensa y compartir un detalle interesante: el regalo que había escogido para la pareja. "Yo siempre hago el mismo regalo en las bodas, un set de vasos para los primeros invitados que tengan, media docena. Son vasos como para whisky, me parece un vaso al que luego le puedes dar otros usos", explicó. Este gesto, sencillo pero significativo, reflejó la personalidad del presentador venezolano y su deseo de ofrecer un regalo útil y con estilo. Mario Vaquerizo, conocido por su carisma y franqueza, también compartió sus pensamientos sobre el matrimonio: "Deseo que cuando las personas se unen en matrimonio es para toda la vida". Su comentario resonó como un buen augurio para los recién casados, en un día lleno de amor y buenos deseos. Por otro lado, Álvaro Muñoz Escassi, quien recientemente ha estado en el centro de atención mediática debido a su ruptura con María José Suárez, optó por mantener un perfil bajo durante el evento. Aunque intentó evitar las cámaras y no hizo declaraciones, su presencia no pasó desapercibida, y su participación en la boda fue objeto de especulación y comentarios. Un día para el recuerdo La boda de Jordi Cruz y Rebecca Lima fue, sin lugar a dudas, uno de los eventos más destacados del año, no solo por la magnitud de los invitados, sino por la forma en que la pareja supo mantener el equilibrio entre la privacidad y el deseo de compartir su felicidad con sus seres queridos. La combinación de un lugar espectacular, un menú de primer nivel y la presencia de amigos y colegas hizo de este día una celebración memorable, que quedará grabada en la memoria de todos los que tuvieron el privilegio de asistir. La elección del Convento de Blanes como lugar para sellar su amor no fue accidental. Este histórico recinto, con su impresionante vista al Mediterráneo, proporcionó el ambiente perfecto para una ceremonia que, a pesar de su secretismo, irradiaba amor y compromiso. La boda, que también sirvió como un homenaje a sus raíces y a su familia, destacó no solo por su elegancia, sino por la autenticidad con la que fue planeada y ejecutada. Reflexión final El matrimonio de Jordi Cruz y Rebecca Lima es un testimonio de cómo dos personas pueden encontrar el equilibrio perfecto entre sus carreras exitosas y su vida personal. Su historia de amor, ahora sellada en una ceremonia tan íntima como grandiosa, es una inspiración para muchos. Desde la elección del lugar hasta los detalles de la celebración, todo fue cuidadosamente seleccionado para reflejar quiénes son como pareja. Y aunque eligieron mantener muchos aspectos en privado, lo que compartieron fue más que suficiente para demostrar que, al final del día, lo que realmente importa es el amor y el compromiso que han decidido honrar juntos.

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La boda de Jordi Cruz y Rebecca Lima

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