La famosa influencer Patricia Steisy, conocida por su sinceridad y por compartir abiertamente su vida con sus seguidores en Instagram, ha tomado una decisión radical en su vida para asegurar el bienestar de su hija, Atenea. Steisy, quien ha ganado popularidad por su participación en reality shows como Supervivientes, ha querido compartir una importante reflexión sobre los cambios que ha implementado en su día a día como madre.
“Estar cerca de ustedes se me está complicando”, comenzó a explicar Steisy en una reciente publicación en su cuenta de Instagram. A medida que septiembre avanza y con ello la vuelta a la rutina, la influencer ha reconocido que la maternidad está transformando completamente su vida y prioridades. Para Steisy, lo más importante es el bienestar de su hija, y por ello todas las decisiones que toma están enfocadas en mejorar la calidad de vida de la pequeña Atenea.
Proteger a Atenea del mundo digital: La decisión de no mostrar su rostro
Uno de los cambios más importantes que ha hecho Steisy en relación a su hija ha sido la decisión de no exponer el rostro de Atenea en las redes sociales. Este es un paso significativo que tanto ella como su pareja, Pablo Pisa, han decidido implementar con el fin de mantener una crianza alejada de las influencias de la fama y las tecnologías. Aunque Steisy sigue hablando abiertamente sobre su experiencia como madre, ha tomado la decisión consciente de proteger la privacidad de Atenea, algo que muchos seguidores han aplaudido.
“Queremos tener una crianza más despegada de las tecnologías y la fama”, explicó la influencer, reafirmando que aunque no muestra a su hija en redes sociales, comparte detalles sobre su día a día como madre. Esta decisión forma parte de un enfoque más consciente y reflexivo sobre el papel de la tecnología en la vida de su hija, quien a su corta edad ya empieza a notar el mundo digital que la rodea.
Los desafíos de la maternidad: Atenea y el equilibrio en la rutina
Steisy también ha compartido cómo está lidiando con algunos de los desafíos propios de la maternidad. Atenea, a medida que crece, está desarrollando nuevas rutinas y comportamientos que están afectando la vida diaria de Steisy. La influencer mencionó que su hija ya no duerme tanto durante el día, aunque tiene pequeños momentos de descanso. Sin embargo, cuando Steisy se acuesta con ella, los periodos de sueño son más largos. “Tiene mamitis”, comentó la influencer en tono de broma, haciendo referencia al apego que siente su hija por ella.
La maternidad, como es natural, ha traído nuevos desafíos y responsabilidades a la vida de Steisy, pero también ha provocado en ella una reflexión profunda sobre sus propias conductas y el ejemplo que quiere dar a su hija. “El miedo de que mi hija acabe copiando los mismos comportamientos que yo ha sido decisivo para mí”, admitió.
Renunciar al uso excesivo de la tecnología: Un cambio necesario
Uno de los temas más destacados en la reflexión de Steisy es el impacto de las redes sociales y la tecnología en su rol como madre. La influencer confesó que, en muchas ocasiones, se ha sentido culpable por el tiempo que pasa frente al móvil en lugar de prestar atención a su hija. “Estar con las redes sociales y ella mirando cómo atiendo a un móvil en vez de a ella, pues me siento mal”, reflexionó. Este sentimiento de culpa ha sido el catalizador que la ha llevado a tomar una decisión drástica: reducir considerablemente su tiempo en las redes sociales cuando está con su hija.
Steisy señaló que, aunque las redes sociales forman parte de su trabajo y de su vida cotidiana, no quiere que Atenea crezca familiarizada con las pantallas, y por ello siente la necesidad de dar ejemplo. La influencer ha reconocido que su comportamiento en relación con la tecnología es un reflejo para su hija, y desea cambiarlo antes de que Atenea se acostumbre a ese modelo. “Para eso tengo que dar ejemplo y buscar mis ratitos cuando ella no me reclame”, explicó, refiriéndose a la búsqueda de un equilibrio entre su vida personal y su presencia en las plataformas digitales.
“Por eso hay días que no aparezco por aquí”, añadió, destacando que su ausencia en redes sociales no es casualidad, sino parte de un esfuerzo consciente por priorizar la relación con su hija y su bienestar.
Reflexiones sobre la maternidad y la crianza consciente
La decisión de Steisy de alejarse parcialmente de las redes sociales cuando está con su hija refleja un cambio profundo en su enfoque hacia la maternidad. La influencer ha dejado claro que ser madre implica sacrificios, pero también una satisfacción personal al ver crecer a Atenea de manera saludable y protegida. A pesar de que su carrera como figura pública está intrínsecamente ligada al uso de las plataformas sociales, Steisy ha decidido que, por el bien de su hija, es necesario establecer límites claros.
Esta reflexión también ha provocado que Steisy repiense su papel en la vida pública y la influencia que puede tener en sus seguidores. Si bien continúa compartiendo su vida personal y profesional, ahora lo hace con más cautela, priorizando la privacidad de su hija y asegurándose de que las decisiones que toma están alineadas con sus valores como madre.
“Es muy complicado”, reconoció la influencer, refiriéndose a los retos que enfrenta al tratar de equilibrar su vida en línea con la vida real. Aun así, su deseo de ser una madre presente y consciente la ha impulsado a tomar decisiones que pueden ser difíciles, pero que considera necesarias para el bienestar de Atenea.
La influencia de Patricia Steisy en la crianza digital
Como Patricia Steisy sigue compartiendo aspectos de su vida y sus reflexiones sobre la maternidad, se está convirtiendo en una voz importante dentro de la conversación sobre la crianza en la era digital. Su decisión de proteger a su hija del mundo de las redes sociales y de crear un ambiente más equilibrado en cuanto al uso de la tecnología ha generado un debate entre sus seguidores y el público en general.
En una sociedad donde las pantallas y las redes sociales juegan un papel tan central, la elección de Steisy de alejar a Atenea de ese entorno es vista por muchos como un paso hacia una crianza más consciente y menos dependiente de la tecnología. Su mensaje resuena especialmente entre padres que también luchan por encontrar ese equilibrio en sus propias vidas.
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