Tras las declaraciones de Gema en las que asegura sentirse «abandonada» por Ana María, salen a la luz los conflictos entre ellas y el recelo de la diseñadora a que la joven acapare los medios.
Tensa y muy distante. Así es como se podría definir la relación actual entre Ana María Aldón (45) y su hija, Gema (27). Ambas se han mostrado muy unidas de cara al público durante estos últimos meses, cuando la separación de la colaboradora y Ortega Cano (68) ha estado en boca de todos. Sin embargo, una demoledora entrevista de la hija de la diseñadora ha dinamitado por completo ese vínculo entre ellas.
«NO ESTUVE A LA ALTURA»
«No tengo casa. Vivía en la que mi madre compró para mí y acaba de venderla», aseguró Gema, admitiendo también que se ha sentido «abandonada» por Ana María: Me dolió más que mi madre. No se daba cuenta de lo que sentía. Muy afectada, la tertuliana se sentó en ‘Fiesta’, el programa en el que colabora, para aclarar algunas de estas afirmaciones: Yo me vine a Madrid estando embarazada para atender los problemas y las necesidades de otra familia -en referencia al ingreso en prisión del diestro-
No sé si eso ella me lo ha perdonado. Quizá no he estado a la altura como madre. Sin embargo, minutos después, su hija entró por teléfono como un gesto de acercamiento, pero la de Sanlúcar no lo recibió como tal. «Tenemos una conversación pendiente y me la podrías haber pedido», aseveró. Una tensa conversación que nadie esperaba, pero que, al parecer, podría ser la tónica habitual entre ellas. Según algunas informaciones del entorno de Gema, al ver la entrevista de su hija, Ana María la llamó presa de la ira, alegando que aquellas palabras la dejaban mal ante el público.
Esta misma fuente asegura que en ningún momento se preocupó por la dura situación que había relatado la joven: La víctima es la hija, no ella. La niña no tiene la culpa de sentirse así. Sufre muchísimo cuando dicen que sus palabras destrozan a su madre. Además, le negaron una habitación en casa de Ortega y se tuvo que ir a una casa prefabricada, estando ya muy embarazada. Esta misma información apunta a que, en privado, la diseñadora estaría criticando de manera muy dura el comportamiento de Gema.
A todo esto se suma también el supuesto recelo de la colaboradora a que su hija se convierta en una estrella mediática y empiece a acaparar la atención de los medios. Muestra de ello fue la contundente frase que pronuncio cuando Emma García (49) invito a la joven al plato.
«¿No me tenéis ya mi? ¿Qué queréis?», expresó muy seria.
Periodista y comentarista en esto del ‘salseo’ y el mundo del corazón.
Paseando disfrazada de gata curiosa entres famosos y famosetes.
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