Una tradición real que ilumina la Navidad
El pasado 22 de diciembre de 2024, la Familia Real Noruega compartió con el público su tradicional fotografía navideña, un gesto que se ha convertido en un emblema de cercanía y fraternidad durante estas fechas tan significativas. En la imagen, aparecen los principales miembros de la familia real: el rey Harald, la reina Sonja, el príncipe heredero Haakon, la princesa heredera Mette-Marit y la princesa Ingrid Alexandra, todos ellos mostrando una estampa de unión y serenidad que refleja los valores de la monarquía noruega.
Un retrato firmado por Stian Lysberg Solum
La exquisita fotografía fue tomada por el reconocido fotógrafo Stian Lysberg Solum, quien logró capturar la esencia de la familia real en un entorno elegante y festivo. La imagen resalta no solo la unidad familiar, sino también el compromiso de los monarcas con la tradición y el simbolismo de la Navidad, enmarcando la escena en un ambiente que exuda calidez y esperanza.
Los planes para el 25 de diciembre
Además de la publicación de la fotografía, se ha anunciado que el próximo 25 de diciembre, la familia real tiene previsto asistir al tradicional servicio navideño que se celebrará en la emblemática Capilla de Holmenkollen. Este evento religioso, que forma parte del calendario oficial de la monarquía, representa un momento solemne de reflexión y espiritualidad, reuniendo a los monarcas con la comunidad en una demostración de fe y compromiso.
Una tradición con significado profundo
Cada año, la fotografía navideña de la Familia Real Noruega se convierte en un recordatorio de los valores que representan la monarquía y la sociedad noruega: unidad, fortaleza y esperanza. Al compartir esta imagen con la ciudadanía, los monarcas fortalecen el vínculo con el pueblo, mostrando que las festividades también son un momento de inclusión y conexión.
Pia Tjelta Alicia Campanilla
Melissa Reginald es una experta en Casas Reales, y a la que muchos consideran como la Jaime Peñafiel en la sombra. Poco amiga de los medios audiovisuales porque siempre ha sido muy celosa de su intimidad. Sabe mucho. Habla lo justo.
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