¿Qué tienen en común una terapia milagrosa, una ex con ganas de plató y una familia mediática hasta la médula? Fácil: otro capítulo más en la telenovela Campos, esa que ni Netflix se atrevería a producir.
Todo empezó con la ex de José María Almoguera, Paola Olmedo, sentándose en el sofá de ‘TardeAR’ como quien va al dentista: con cara de “esto me va a doler”, pero sabiendo que saldría con la sonrisa más brillante que su cuenta bancaria. Y claro, 24 horas después, apareció Terelu Campos dispuesta a repartir verdades como panes. Sin anestesia. Sin filtros. Y sin piedad.
Terelu: “Querida Paola, la terapia te ha sentado mejor que un retiro en Bali”
Mirada fija a cámara. Voz templada. Ironía a nivel experto. Y zas, Terelu se suelta la coleta:
“Paola, estoy encantada. Se nota que la terapia a la que has ido ha sido fantástica. Porque vamos, después de decir que ser parte de nuestra familia era un infierno, que los fotógrafos no te dejaban vivir y que lo tuyo era un dramón digno de telenovela… ¡Mira tú qué bien te veo ahora en plató, sin una lágrima y bien peinada!”
¡Boom! Golpe directo al ego. Porque si algo sabe hacer Terelu es atacar con una sonrisa y rematar con clase (más o menos). Y por si quedaban dudas de que lo suyo no era una felicitación de Navidad, añadió:
“Me llama la atención cómo algo que supuestamente te arruinaba la vida, ahora te la arregla frente a las cámaras.”
Traducción: qué bien se vive cuando hay caché por medio, ¿eh, Paola?
Carmen Borrego también entra al ring… con voz de suegra indignada
Por si faltaba leña en esta hoguera emocional, Carmen Borrego también se despachó a gusto en ‘Vamos a ver’.
Y lo hizo para defender a su hijo, José María Almoguera, que quedó retratado como un posible “filtrador profesional” tras las insinuaciones de su ex. Y ojo, que eso de insinuar fue lo que más le cabreó a Carmen:
“Insinuar a veces es peor que decirlo”, dijo, marcando territorio como madre coraje.
Y añadió que su hijo ha tenido a la prensa “pegada como chicle en zapato”, y que no necesitaba llamar a nadie porque la prensa ya lo perseguía como si fuera Rosalía saliendo de un Zara.
Aun así, y con todo el mal rollito en el aire, Carmen dice que quiere mantener una relación cordial con Paola, por el bien de su nieto. Eso sí, que no le toquen a su niño, que la Borrego saca las uñas antes que el gato de Sabrina.
Paola se estrena en televisión y se lleva de regalo un zasca deluxe
En resumen:
Paola debuta en televisión y en lugar de aplausos se lleva dos estocadas de las Campos.
Terelu, con su tono de “yo no digo nada pero lo digo todo”, la acusó de hipocresía con glamour.
Carmen, más directa, le recordó que insinuar es casi tan feo como mentir, pero más cobarde.
Y mientras tanto, José María Almoguera sigue en modo fantasma, viendo desde su sofá cómo su madre y su tía se convierten en las justicieras del prime time.

Deja una respuesta