No se perdonan
Hace solo unas semanas que Violeta dejó a Julen porque estaba sintiendo más que amistad por el argentino, pero ahora no está yendo todo tal y como la viceversa esperaba. “Se me ha caído la venda de los ojos”, confesó Violeta.
Empezaron discutiendo por la comida y acabaron con reproches. ¿Habrá reconciliación? La carne es débil y la estancia en la isla es muy corta. ¡Todo se verá!
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