FALLECE LA MADRE DE NORMA DUVAL A LOS 89 AÑOS
«Se ha ido tranquila y como ella quería», ha explicado la ‘vedette’ sobre la muerte de doña Purificación, en cuyo cuidado estaba volcada desde que le diagnosticaron alzhéimer.
Momentos difíciles para Norma Duval (65). La ‘vedette’ ha dicho adiós a su madre, Purificacion Aguilera, quien fallecía a los 89 años a consecuencia de una parada cardiorrespiratoria después de 11 años luchando contra el alzhéimer.
Durante este tiempo, la artista ha estado volcada en que su progenitora tuviera la mejor calidad de vida posible y los mejores cuidados. De hecho, vivía con ella en su chalet de La Moraleja, donde acudía a visitarla a diario su hijo Albino y donde ambas han podido compartir los últimos años de su vida.
«He podido disfrutar de ella y estar con ella, pero este año ha estado muy delicada», ha explicado Norma, quien ha subrayado que, pese a su dolencia, «se ha ido tranquila, rodeada de su familia y como ella quería». Pese a la enorme tristeza, la actriz, que se encuentra inmersa en la grabación de ‘El desafio’ (Antena 3), ha reconocido estar serena porque ha hecho todo lo que estaba a su alcance «Dentro del dolor, estamos tranquilos porque la hemos cuidado y le hemos dado mucho amor». Además, ha querido recordar que la enfermedad neurodegenerativa que sufría «es muy dura» y aprovechar para felicitar «a todos los que cuidan a los demás, porque es una generosidad enorme».
MUY ARROPADA
En estos momentos tan tristes, la artista ha estado arropada por su pareja, Matthias Kiihn (53), por sus tres hijos, Marc (37), Yelko (35) y Cristian (27), y por sus sobrinas, Paula y Andrea. A la íntima despedida que la familia ha celebrado en el cementerio de San Isidro, en Madrid, tampoco han faltado Paloma Segrelles y su madre. De riguroso luto, la presentadora agradeció todas las muestras de cariño recibidas y también quiso recordar a las mujeres que la han ayudado a cuidar de su progenitora durante este tiempo. En el recuerdo, como siempre, su hermana Carla, quien falleció en 2010 a los 46 años y cuyos restos mortales descansan ya para siempre a pocos metros de los de su madre.
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