Ya han pasado 12 años desde que el romance entre el por entonces presidente francés y una de las supermodelos más famosas del mundo sorprendiera a propios y extraños, pero siempre han demostrado ser una pareja muy solida. Y ahora más que nunca.
Nicolas Sarkozy (65) y Carla Bruni (52) llegaron de la mano y con paso firme a los juzgados donde el exmandatario se sienta en el banquillo de los acusados por un supuesto delito de tráfico de influencias y corrupción.
De demostrarse su culpabilidad, el político se enfrentaría a una pena de hasta 4 años de cárcel y a una multa millonaria. Sin embargo, él sigue defendiendo a capa y espada su inocencia.
Al igual que Carla, que no solo quiso estar a su lado en el careo frente al juez, sino que después utilizó sus redes sociales para mandar este contundente mensaje: «Yo apoyo a mi hombre».
Pese a estos mensajes positivos, el futuro del expresidente no parece nada halagüeño, puesto que, además de estar implicado en este caso, tiene otras causes pendientes relacionadas con la supuesta financiación ilegal de una de sus campañas.
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