El conflicto entre Maite Galdeano, su hija Sofía Suescun y su yerno Kiko Jiménez continúa escalando, ahora con la posibilidad de que Galdeano se mude cerca de la pareja, lo que ha generado una reacción inmediata por parte de ellos. El origen de este enfrentamiento se remonta a unas semanas atrás, cuando Galdeano acusó a su hija de haberla expulsado de su casa y señaló a Kiko como el responsable de la separación entre madre e hija. Desde entonces, la conductora de autobuses ha expresado su descontento públicamente, mientras se refugia en su piso de la playa.
En el programa Fiesta, donde Kiko Jiménez colabora, este tema ha sido recurrente, y en su más reciente intervención, Kiko aseguró que todo se encontraba tranquilo, sin novedades, y que la pareja no mantenía contacto con Maite. Sin embargo, la calma se vio interrumpida cuando Alejandro Albalá, también colaborador del programa, reveló que Maite Galdeano estaría buscando una casa cerca de la pareja, lo que podría desestabilizar aún más la situación.
Ante esta revelación, Kiko Jiménez explicó que ya han solicitado una orden de alejamiento para proteger su espacio personal. “Ella es libre de hacer lo que considere”, mencionó Kiko, pero también subrayó la importancia de respetar el espacio que Sofía ha pedido. La situación, según él, está en manos de un juez, quien determinará si se concede la orden de alejamiento, mientras tanto, la tensión sigue latente.
Galdeano, por su parte, ha reiterado su intención de hacer “lo que haga falta” para recuperar el contacto con su hija, lo que mantiene la situación en una constante incertidumbre y bajo el escrutinio público.
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