Tras duce años de matrimonio, la heredera al trono y su marido se mostraron muy cariñosos en un evento estival, lo que confirma una vez más que no están en crisis.
No hay mejor manera de finalizar con los rumores de crisis que mostrarse más enamorados que nunca en público. Y eso es precisamente lo que han hecho Victoria de Suecia (45) y Daniel Westling (48) durante un concierto de música hip hop al que asistieron en compañía de su hija Estelle (10) y unos amigos en las ruinas del castillo de Borgliolm, ubicado en la isla de Oland.
El matrimonio, que el pasado mes de junio celebró su decimosegundo aniversario, derrochó complicidad y mucho amor durante todo el evento, en el que no faltaron abrazos, arrumacos y besos.
«RUMORES INFUNDADOS»
Estas románticas imágenes de la hija de los reyes Carlos Gustavo (76) y Silvia (78) con su esposo llegan cinco meses después de que la Casa Real, primero, y ellos mismos, después, desmintieran los fuertes rumores de crisis, que cobraron especial fuerza durante las pasadas Navidades y que aseguraban que estaban al borde de la separación después de un desagradable episodio protagonizado por Daniel.
Especulaciones que coincidieron también con la preocupación por la salud del consorte de la princesa, aquejado de una enfermedad renal crónica por la que tuvo que someterse a un trasplante de riñón en 2009, ya que su aspecto demacrado y desmejorado a finales del año pasado hizo saltar las alarmas.
«Ha llegado a nuestro conocimiento que hay un extenso rumor negativo difundido con respecto a nuestra relación privada. Se están difundiendo acusaciones sobre traición en la relación y un divorcio inminente. Queremos dejar claro, para proteger a nuestra familia, que los rumores que ahora se están difundiendo son completamente infundados», explicaron ambos en un comunicado en la cuenta oficial de Instagram, de la familia real sueca.
Melissa Reginald es una experta en Casas Reales, y a la que muchos consideran como la Jaime Peñafiel en la sombra. Poco amiga de los medios audiovisuales porque siempre ha sido muy celosa de su intimidad. Sabe mucho. Habla lo justo.
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