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Jesulín vuelve a la tele por una poderosa razón

Jesulín vuelve a la tele por una poderosa razón

Tras años alejado de todo, en los últimos meses ha participado en varios programas y ha fichado por El desafío quizá una estrategia para tener presencia en televisión y proteger en lo que pueda su hija que va a cumplir los 18.

Jesulín de Ubrique (47) nunca ha sido un rostro habitual de los medios de comunicación; más bien ha rehuido de ellos durante años y sus participaciones han sido muy contadas, casi siempre relacionadas con sus proyectos profesionales. Una actitud que ha cambiado en los últimos meses, en los que el diestro ha dado un paso al frente y ha saltado al ruedo mediático por la puerta grande. La televisión autonómica de su tierra, Andalucía, fue el medio elegido para debutar, primero en El programa de tu vida, de Toñi Moreno, y más recientemente en El show de Bertín. De ahí ha pasado a participar en Dos parejas y un destino, de Televisión Española, donde incluso participé brevemente su esposa, Maria José Campanario (41), y su próximo reto será concursar en El desafío, de Atresmedia.

PREGUNTAS INCÓMODAS

En solo siete meses, sus apariciones en televisión son muchas más que en toda una década y cabe preguntarse la razón que ha motivado este cambio de tercio. Lo ha hecho, además, en un momento delicado, ya que coincidió con la publicación de una carta demoledora de su mujer contra Belén Esteban (47), que fue respondida por esta en su programa y creé una gran polémica que se alargó semanas. Un tema que no fue abordado en ninguno de los programas a los que acudió Jesús porque esencialmente son formatos amables o, como se denominan en el sector, «blancos», que no entran en ciertos temas que pueden ser incómodos para el protagonista. De esta manera, el diestro ha conseguido ganar en visibilidad sin necesidad de contestar a preguntas incómodas que afectan a su vida privada, como su inexistente relación con su hija mayor, Andrea (21). En cambio, ha podido exponer ciertos aspectos de su vida personal y marital con tranquilidad y calma y, dado el sentido del humor que siempre le ha caracterizado, ha hecho las delicias del público y, una vez más, se lo ha metido en el bolsillo. Pero, ¿por qué ahora?

Es bastante probable que esta actitud responda a una maniobra de dulcificación de su imagen y la de su familia de cara a un acontecimiento que se producirá el próximo 18 de abril, cuando su hija Julia cumpla 18 años. Este es un tema que tiene muy preocupados tanto a Esplín como a Maria José Campanario, que saben que el exceso de atención que va a despertar su hija puede repercutir en toda la familia. Como ha ocurrido con los hijos de otros famosos, existe mucho interés en saber cómo es la joven, que, al parecer, se vio involucrada, sin quererlo, en el último desencuentro entre Maria José y Belén, puesto que se comentó que fue ella quien avisó a su madre de que la colaboradora estaba hablando en Sálvame, lo que provocó su enfado y la carta posterior que colgó en sus redes sociales. Esto generó un fuerte revuelo que se llevó por delante la supuesta tranquilidad dentro de la guerra fría que mantienen desde hace arios y abriendo el debate sobre la relación o no que mantiene Julia con su hermana Andrea.

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SU PAPEL EN LAS REDES

El cumpleaños de la joven puede marcar un antes y un después en el clan Janeiro y es un momento que sin duda creará gran expectación. Por ahora se desconoce si Julia querrá seguir guardando el anonimato o, por el contrario, se dejara tentar por la fama que le viene de cuna y probaré suerte en los medios de comunicación, como han hecho otros hijos de personajes conocidos. Fue Maria José la que desmintió a través de una tercera persona que su hija quisiera participar en un reality, algo que se comentó en su momento, y es que, conociendo a sus padres, es de suponer que intentarán alejarla cuanto puedan del foco mediático, sabedores de las luces y sombras que este conlleva. Pero incluso así la joven podría buscar ser visible de otra manera, por ejemplo, a través de las redes sociales, que maneja con soltura como cualquier joven de su edad. No en vano tiene su Instagram abierto al público y, a medida que se acerca la fecha de su cumpleaños, crece en seguidores. Cualquiera puede ver sus fotos, en las que se muestra como una gran amante de la moda y de la belleza, siguiendo las últimas tendencias en sus estilismos. Algo que podría desembocar en que, además de continuar con sus estudios de Administración de Empresas, decida probar suerte como influencer.

Julia tiene el derecho a decidir sobre su futuro y tome la decisión que tome, cuando esto suceda, Jesulín habrá recuperado su presencia en algunas de las principales cadenas de televisión y podría minimizar el impacto y los comentarios que la mayoría de edad de Julia puedan suscitar, frenando así el impacto mediático que la noticia tendrá. Algo que, por cierto, no hizo con su primogénita, Andrea, y que vuelve a evidenciar las diferencias en la relación que mantiene con sus dos hijas, y que han sido muchas.

MUCHAS DIFERENCIAS

De sobra es conocido lo mucho que duele este tema a Belén Esteban, que no pudo callarse al escuchar en un programa de la competencia como Jesulín se mostraba como un padre atento hablando de sus hijos. La colaboradora aseguró visiblemente enfadada que:

Será padre para dos hijos, pero a una no la conoce y nunca la ha llevado al colegio… A mí no me hace daño, hace daño a otra persona. Y la otra persona no se calla. Así que… que no tense la cuerda. No es una niña, es una mujer.

Así, reitera una afirmación que sostiene hace tiempo: Andrea «está cansada». Y por sus gestos y comentarios parece que, si bien antes la propia joven pedía moderación a su madre, ahora esta tiene vía libre para decir lo que opina sobre su padre. En este contexto solo el tiempo dirá si hace una diferencia más y el acercamiento de Jesulín a los medios ha sido una estrategia para proteger a su hija mediana, pero mientras tanto ha borrado de un plumazo las especulaciones sobre una crisis matrimonial con su esposa, después de emocionarse al relatar ante Bertín Osborne (66) como conoció a su mujer y desvelar que se había enamorado de ella tras ver en la odontóloga «algo que no había visto nunca». También ha demostrado que con el paso de los años no ha perdido su gracia natural, realizando varias confesiones de alcoba. Así, en Dos parejas y un destino, su esposa se sumaba a la comida que el anfitrión sorpresa, el estilista José Bono, había organizado, y después de que comentaran que con el confinamiento se estaban pasando «de cómodos», dando mayor uso a los «pijamas y la ropa interior», la de Castellón sorprendía con una revelación digna de un matrimonio con química sin fisuras: «Jesús no gasta mucho de eso, porque no lleva». Entre risas, el diestro explicaba que los calzoncillos le molestaban para torear y que al final decidió depilarse las piernas y «directamente, del tirón, en la taleguilla». Pero no fue la única confesión que hizo el de Ubrique, quien mostró su lado más romántico a Chenoa (45) explicándole cómo le gustaba dormir con su esposa: «A mí me gusta dormir agarrado, pero de vez en cuando a mi mujer le da mucho coraje… Ella siempre dice ‘mi espacio, y tu espacio’». Después explicaba cómo conseguía salirse con la suya. «Si ella no viene, pues voy yo… Entonces, yo hago así y pongo la mano en ella y digo ‘sé que estás aquí’», escenificaba en un claro gesto por demostrar que el suyo es un matrimonio unido.

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UNA RELACIÓN INEXISTENTE

Belén Esteban siempre ha denunciado públicamente el desapego y la falta de interés que ha mostrado Jesulín con su hija, Andrea. La joven tiene 21 años y aún sigue esperando la conversación que su padre aseguró que tendrían al cumplir la mayoría de edad. Quizá por eso, y porque puede que considere rota la relación con el diestro, la Esteban lleva tiempo insistiendo en que su hija nunca hablará en televisión, pero está cansada de la situación y ya no se quiere callar.


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