El panorama mediático español ha quedado conmocionado por las recientes declaraciones de Frank Cuesta, conocido durante años por su defensa del mundo animal y por ser una figura singular dentro del universo televisivo. El miércoles 13 de mayo, el popular herpetólogo difundió un vídeo que ha revolucionado las redes sociales y ha generado un auténtico tsunami de reacciones públicas, tanto de seguidores fieles como de detractores y periodistas especializados.
Frank Cuesta se autoinculpa: “He mentido por ego y mitomanía”
En una publicación audiovisual que ha recorrido todas las plataformas digitales en cuestión de horas, Frank Cuesta sorprendía al público con una confesión tan inesperada como perturbadora: reconocía haber llevado durante años una vida ficticia. Afirmaba que su santuario de animales no era tal, sino una granja, y que muchos de los animales allí presentes habían sido comprados, no rescatados.
Asimismo, pedía disculpas de manera pública a todas las personas que habían creído en su causa, justificando sus acciones por motivos personales que englobaban un supuesto desbordamiento del ego y una inclinación hacia la mitomanía. Este mea culpa no tardó en provocar un aluvión de reacciones en todos los medios, desde tertulias de sobremesa hasta debates en horario de máxima audiencia.
Nacho Abad toma la palabra: “¿Es verdad lo que dice o es un chantaje?”
Uno de los primeros rostros televisivos en analizar lo ocurrido ha sido Nacho Abad, presentador del programa de investigación ‘Código 10’, emitido por el canal Cuatro. Con su habitual tono inquisitivo, el periodista planteaba durante su intervención una serie de interrogantes que añadían una nueva capa de incertidumbre a esta historia.
“El vídeo es real, sí. Pero lo que dice en él, ¿también lo es? Porque si no lo es, entonces estaríamos hablando de una coacción. ¿Qué tipo de presión o chantaje puede estar recibiendo Frank Cuesta para decir eso?”, expresaba Abad, visiblemente sorprendido por la radicalidad de las afirmaciones del conocido defensor animal.
“La caída de un mito”, según Nacho Abad
El análisis de Nacho Abad no se quedó únicamente en el contenido del vídeo, sino que se adentró en las consecuencias emocionales que este podría estar generando en la opinión pública. “El escándalo tiene tanto calado porque se ha derrumbado una figura que muchos idealizaban. Un mito que la gente imaginaba comprometido hasta la médula con el bienestar de los animales”, reflexionaba.
En palabras del presentador, el drama no reside únicamente en si la confesión es verídica o no, sino en el vacío emocional que deja la caída de una figura que simbolizaba autenticidad, compromiso y lucha por los más vulnerables. La decepción, en este caso, sería tan potente como el cariño que generó durante años.
Las dudas sobre las donaciones: ¿Qué pasó con el dinero recaudado?
Más allá del componente emocional y mediático, las palabras de Frank Cuesta abren la puerta a una posible investigación económica. Nacho Abad fue particularmente incisivo en este punto durante el desarrollo del programa. “Él pidió donaciones para comprar terrenos y levantar un santuario. Ese lugar hoy se define como una granja. ¿Qué pasó con ese dinero? ¿A qué cuenta bancaria fue a parar? ¿Cuánto recaudó?”, se preguntaba en directo.
El periodista insinuó incluso que podría existir una posibilidad de estafa si se confirmara que los fondos recaudados con fines altruistas fueron destinados a otros propósitos, lo cual abre un preocupante frente judicial que podría tener consecuencias devastadoras para la imagen de Frank Cuesta.
Roma Gallardo defiende a Frank Cuesta: “Todo es teatro”
Durante la emisión de ‘Código 10’, también se pronunció Roma Gallardo, conocido ‘influencer’ y colaborador habitual en diversos programas televisivos. Fiel a su estilo provocador, no dudó en restar gravedad al asunto y manifestó su firme creencia en la inocencia de Cuesta. Para Gallardo, todo forma parte de una representación con tintes de ironía.
“Cuando dijo ‘no tengo cáncer’, se notaba que lo decía en tono sarcástico, que lo leyó en algún sitio o simplemente estaba respondiendo con ironía”, argumentaba el influencer. En su intervención, defendió que la dolencia de mielodisplasia que afecta a Cuesta está “categorizada como cáncer por la Asociación Americana del Cáncer”, razón por la cual no considera que haya mentido en ese aspecto concreto.
¿Verdad o montaje? El debate sobre el estado de salud de Cuesta
Otro de los grandes ejes del debate en torno a la figura de Frank Cuesta es el relativo a su estado de salud. Las declaraciones del propio Cuesta, en las que habría negado tener cáncer para luego matizar sus palabras, han generado desconcierto y escepticismo.
Roma Gallardo quiso dejar claro que, desde su punto de vista, el diagnóstico de mielodisplasia sí puede considerarse una forma de cáncer, aunque no necesariamente implique una malignidad agresiva como en otros tipos. Esta defensa, sin embargo, no ha convencido a todos los espectadores ni a la comunidad médica, que pide claridad y responsabilidad a figuras públicas a la hora de comunicar sobre enfermedades graves.
El peso del personaje: ¿Víctima de su propia leyenda?
Muchos analistas coinciden en que parte del problema radica en la intensa identificación del personaje mediático de Frank Cuesta con una causa concreta: la defensa de los animales en peligro. A lo largo de los años, su figura se construyó como la de un guerrero solitario, enfrentado a mafias y traficantes de especies, en entornos hostiles y bajo constantes amenazas.
¿Qué sucede cuando esa narrativa se desmorona? ¿Puede una figura pública soportar la presión de haber alimentado un mito y vivir bajo su sombra? Estas preguntas, aunque retóricas, son clave para comprender la magnitud del escándalo.
El futuro incierto de Frank Cuesta
A día de hoy, Frank Cuesta permanece en un limbo mediático. Las dudas sobre sus intenciones, el destino del dinero recaudado, la veracidad de sus problemas de salud y la autenticidad de sus disculpas están aún por resolverse. Los medios de comunicación siguen desmenuzando cada palabra y cada gesto en busca de respuestas, mientras el público oscila entre la compasión, la decepción y la rabia.
Lo que resulta innegable es que, sea cual sea el desenlace, la figura de Frank Cuesta ya no volverá a ser la misma. La sombra de la sospecha ha oscurecido su legado, y solo el tiempo dirá si podrá o no reconstruir la credibilidad que alguna vez lo convirtió en un referente de la causa animalista en España.

Ernesto Martín es periodista especializado en prensa rosa, realeza y cultura pop. En GATITAROSA.COM analiza con ironía y precisión los entresijos del universo mediático.
Deja una respuesta