Drama en los Cayos

Drama en los Cayos: Playa Misterio monta el show en directo y obliga a cambiar las reglas de ‘Supervivientes 2025’

¡Agarra las palomitas, cariño, que lo de anoche fue televisión en estado puro!

En plena gala de ‘Supervivientes 2025’, mientras el huracán tropical les despeinaba hasta las ideas, los concursantes de Playa Misterio decidieron que ya habían tenido suficiente circo y poca comida. Y claro, se plantaron en directo como si aquello fuera una asamblea sindical.

Tormenta, hambre y cabreo generalizado

Ya llevan más de un mes jugando a “venga, a sobrevivir como si esto fuera ‘Los juegos del hambre versión deluxe’”, y lo cierto es que los Cayos Cochinos están más cochinos que nunca. Dos tormentas les han machacado. En la primera, evacuados. En la segunda, agárrate fuerte al coco y a ver si no se apaga el fuego.

Pero el martes, la tercera fue la vencida. Llueve a cántaros, no se puede grabar al aire libre, y les tocó ir a la Palapa. ¡Ole, ole y ole! Lo que no esperaban los guionistas era que el drama no lo iba a traer el clima, sino Makoke y compañía.

Makoke, Manuel y Nieves: los nuevos mártires del reality

Se presentan allí empapados, sin fuego, sin comida y sin paciencia. Makoke, en plan diva del naufragio, suelta:

“Estamos empapados, es horrible, está todo mojado”

Vamos, que ni Titanic vivió tanto drama con tanta laca.

Por si fuera poco, viven en secreto en la playa (secreto que ya se sabe, gracias, Telecinco) y tienen menos comida que una reunión de influencers veganos: una triste lata para tres personas en toda la semana.

Recompensa: fuego y cerillas… ¿Perdón? ¿Eso es un premio?

La organización, muy lista ella, pensó que con un mechero y un poco de fuego se arreglaba el tema. Pero Manuel no estaba para bromitas:

“No tenemos comida ninguna. Me da igual comer arroz duro, ¡pero comer!”.

Y Makoke, muy en su línea, remató:

“Nos da igual el fuego si no tenemos qué cocinar”.

¡ZASCA! En toda la Palapa.

Laura Madrueño intenta apagar el fuego… metafóricamente

Laura, que bastante tiene con no mojarse el maquillaje, intentó suavizar la movida diciendo que el fuego es para secarse y no morir de hipotermia. Pero ni eso coló. Así que, improvisando como buena presentadora de realities en apuros, soltó la bomba:

“Si ganáis la prueba… os lleváis fuego Y tres latas.”

¡BOOM! Hasta Carlos Sobera aplaudió desde plató como si hubieran aprobado Selectividad!

Y al final, lágrimas, sudor y… ¡latas!

La prueba: aguantar una barra como si les fuera la vida en ello. Spoiler: les iba. Diez minutos de tensión, músculos temblando y cero glamour, pero lo consiguieron. Tres latas de comida y el fuego. Se abrazaron, lloraron y celebraron como si hubieran ganado MasterChef.