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Carmen Sevilla cumple 92 en el olvido

La mítica actriz sigue recibiendo las visitas de su íntimo amigo Moncho Ferrer y de su familia más cercana. «Es un consuelo estar con ella, aunque no me reconozca», afina su hijo.

Carmen Sevilla acaba de cumplir 92 años. Lo ha hecho, como en los últimos seis, en la residencia de Aravaca, en Madrid, donde reside desde que en 2015 el alzhéimer hizo imposible que continuara viviendo en su domicilio. Sin embargo, el doloroso e inexorable avance de su enfermedad no ha impedido que en una fecha tan especial la artista haya estado acompañada, tal y como ha reconocido Moncho Ferrer, su fiel amigo desde hace 40 años. Ha sido él quien le llevó un gran ramo de flores y compartió unas horas con la presentadora, que actualmente es historia del cine y la Televisión patria.

«Está estupenda, tranquila. La he dejado recién peinada, como dice la canción, escuchando ‘La bella de Cádiz’. Carmen necesita paciencia y tranquilidad. Sigue estando delicada de salud, pero, dentro de lo que es, está bien», ha confesado el relaciones públicas, que no oculta que por el paso de los años su estado «es delicado». Aun así, afirma que se mantiene muy activa:


«Hace ejercicios de gimnasia y se da una vueltecita por el centro, que es una maravilla».

ES MUY DOLOROSO

Su hijo, Augusto J. (58), es otra de las pocas personas que acuden a ver a la presentadora de ‘Telecupón’. No lo hizo el día del aniversario porque sabía que iba a haber cámaras, pero se acercó a visitarla todas las semanas, pese a que ella desde hace tiempo no sabe quién es. «Es un consuelo estar con ella, aunque no me reconozca», afirma sin ocultar el desgarro que eso supone: «Es muy doloroso para un hijo».

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Pese a ello, asegura que le alivia ver que está «muy bien cuidada» y afirma que «al margen de su enfermedad está estupenda». De hecho, aunque arrugada y muy mayor», sigue conservando rasgos de su característica belleza «Sigue siendo muy coqueta, le gusta que le peinen y la arreglen todos los días». También «que la acaricien», cuenta Augusto, ya que, aunque no sabe, «si escucha», si «sient@>.


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