Muy satisfecha por la acogida del gazpacho y el salmorejo, presenta sus nuevas cremas de verduras y sus patatas fritas. «Lo que me importa es que veo que le gusta a la gente», asegura.
Belén Esteban (47) continua imparable en su nueva faceta de empresaria.
Tras el éxito apabullante del gazpacho y el salmorejo de su marca, Sabores de la Esteban -que en verano se han vendido un 50% más de lo que se esperaba-, la colaboradora de ‘Sálvame’ acaba de sumar nuevos productos a su catálogo las patatas fritas y las cremas de verduras, de calabacín y de calabaza.
«Empezamos siendo siete personas y ya somos cincuenta. Estoy muy orgullosa porque estoy dando trabajo a mucha gente que lo necesita», ha asegurado en la presentación, donde tampoco ha dudado en valorar la baja calificación que otorgó la OCU a sus primeros productos.
«Los respeto mucho, pero estoy muy contenta porque yo lo veo en las ventas y eso es lo que me importa, que le gusta a la gente».
BELÉN ESTEBAN Al PIE DEL CAÑON
Una vez más, la ‘princesa del pueblo’ ha querido dejar claro que detrás de este lanzamiento hay mucho trabajo y muchos viajes a las fábricas murcianas donde han tenido lugar las elaboraciones: «Soy muy estricta como jefa. Hasta que no sale como quiero, no doy el OK al producto».
El resultado son productos caseros, «como hacían nuestras mamás», y al alcance de todos los bolsillos.
«Yo he fijado los precios -1,50 euros la bolsa de patatas y 1,99 las cremas porque quiero que lo pueda comprar todo el mundo».
Pero si de algo se siente orgullosa es de su flota de camiones:
Queda, por tanto, Belén para rato.
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