Sin duda, es uno de los platos estrella de la temporada de calor, pero no siempre es todo lo completa que debería. Descubre las claves para conseguir que quede tan deliciosa como sana.
En las últimas décadas, las ensaladas han pasado de acompañamiento clásico a plato por si solo, con frecuencia a único. Sobre todo en la temporada estival.
Cualidades como ser fácil de elaborar y resultar ligera y fresquita para los días de calor la han convertido en una de las reinas de los menús ideales para los meses de calor. Sin embargo, no siempre resulta todo lo saludable y nutritiva que debería ser.
Que sea sencilla y rápida de preparar no significa que deba incluir siempre los mismos ingredientes. Para que resulte un plato realmente completo, es necesario tener en cuenta que incluya diferentes nutrientes.
Natural y casera. Uno de los aspectos fundamentales es apostar siempre por productos de la tierra y caseros. Con el tema de las verduras y hortalizas no suele haber problema, pero si con las salsas y aliños.
Es mejor, opción siempre elaborarlos en casa, por ejemplo, preparando una vinagreta con aceite de oliva virgen extra con limón o vinagre de manzana o mezclando mostaza con miel que comprarlos ya hechos, ya que así evitamos, sal en exceso.
La base de una ensalada nutritiva es que contenga vegetales verdes, hortalizas variadas, una proteína como carnes magras, pescados o mariscos, lácteos o huevos y frutas y/o frutos secos.
Redactora de GATITAROSA.COM Experta en nutrición y dietética. Actualmente, lleva la sección de alimentación y nutrición de la revista.
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