Amparo Larrañaga (59) regresa a los escenarios teatrales tras sufrir una grave afección cardíaca de la que, afortunadamente, ya está recuperada. Será en el madrileño Teatro Maravillas y con la obra ‘Laponia’, la misma que tuvo que suspender para centrarse en su salud.
«Estaba haciendo una obra de teatro, a la que ahora vuelvo, y fui al cardiólogo porque tenía la tensión alta. Y acabé en el quirófano», recordó la actriz a su regreso.
«Di con un equipo de médicos maravilloso. Me escucharon y me dijeron que iban a hacer más pruebas aparte de las de la tensión. Resulta que tenía una insuficiencia mitral severa que requería de una cirugía», añadió.
Tras el diagnóstico, la intérprete fue operada para sustituir la válvula, la mitral y, tras superar el pesado pos-operatorio y una anemia surgida después, ha podido recuperar su vida normal. Eso sí, tras su regreso a las tablas confesó que el proceso fue duro, aunque el peor momento tuvo lugar al descubrir que la operación iba a ser a corazón abierto y que había que detener durante algunos minutos tanto su latido como el pulmón.
Cuando me lo dijeron, pensé que igual ya no hacía falta ni operarme porque casi me caigo muerta, manifestó haciendo gala de su gran sentido del humor.
Periodista y comentarista en esto del ‘salseo’ y el mundo del corazón.
Paseando disfrazada de gata curiosa entres famosos y famosetes.
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