Si hay un ingrediente natural que ayuda a combatir la piel grasa y el acné, ese es, sin duda, el tomate. Y es que sus nutrientes son muy eficaces para este tipo de cutis. Además, contribuyen a eliminar espinillas y puntos negros, así como a purificar los poros. Aunque en la actualidad existen en el mercado cosmético que lo incluyen en su formulación, la mejor manera de emplearlo es mediante una mascarilla casera. Para elaborarla, basta con rallar un tomate y batirlo con un par de rodajas de pepino, unas hojas de menta trituradas y una cucharada de miel.
A continuación, aplica la mezcla sobre las partes del rostro más grasas o sobre las zonas de granitos y deja que la mascarilla actúe durante veinte minutos. Después, retira con un disco de algodón y lava la cara con abundante agua tibia.
Ponte un tónico para cerrar los poros e hidrata la piel con tu crema habitual -a ser posible, especifica para cutis grasos-. Y repite la aplicación de la mascarilla una o dos veces por semana.
Lorena Martín de Vidales es una apasionada especialista en belleza y vida sana, comprometida en ayudar a las personas a descubrir su mejor versión a través de prácticas saludables y cuidados de la piel efectivos. Con una sólida formación en cosmetología y nutrición, Lorena ha dedicado su carrera a investigar y compartir los secretos para mantener una piel radiante y un estilo de vida equilibrado.
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